Y desde entonces soy

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Cuando nací El me ofreció sus brazos
mi primer llanto ese día consoló.
Rodeó de ángeles mi pequeña vida,
me dio el aliento y desde entonces soy.

Cada vez que reclamo su presencia
en sus promesas puedo escuchar su voz.
Y no importa cuanta cosa falte
Porque El lo llena todo con su amor.

No temas porque estoy contigo,
no desmayes porque soy tu Dios.
Yo te sostengo cada día de tu mano
Y en mi justicia te sustento Yo.

No dejaré que pases de mi lado
Dueño y Señor de la vida y del amor.
¿Adónde me huiré de tu presencia?
de lo profundo, Señor, clama mi voz.

Cuando nací El preservó mi vida
su diestra suave, poderosa sustentó
rodeó de ángeles mi pequeña cuna
me dio el aliento y desde entonces soy.

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