Un cambio Radical

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Marcos 10:17-31

Introducción

Cuando el Señor Jesucristo nos llamó a sus caminos una cosa que nos ha pedido a cada uno de nosotros es que tengamos un cambio real y verdadero en nuestras vidas. El Apóstol Pablo escribiendo a los Corintios decía "De modo que si alguno esta en Cristo nueva criatura es" el mismo Señor Jesús le decía a Nicodemo que el que no naciere de nuevo no podrá ver el reino de Dios.

Por esto es que debemos tener en claro que debemos ser diferentes al resto, hay muchas personas que nos están mirando, tenemos una nube de testigos, quienes deben dar fe que efectivamente nuestro cambio de vida es Radical. El Apóstol Pablo dice "Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo", que en nuestras vidas nosotros también podamos decir imítenme a mí porque yo imito a Jesucristo. Debemos por tanto ser diferentes.

Eliseo es un hombre diferente, por ello la Mujer Sunamita le pide a su esposo hacer una habitación para que este hombre de Dios pernoctara en su casa. Un hombre diferente que tenía el respaldo de Dios, este hombre diferente le pide a su criado averiguar la necesidad de la mujer. Ud., conoce la historia. Amado hermano, cuando nosotros somos diferentes y cuando hay un cambio real en nuestras vidas, nuestros compañeros, amigos, vecinos, vendrán a ti para que des un consejo o una palabra de aliento. En una oportunidad en mi oficina, llegó un compañero muy apurado a decirme que una de nuestras compañeras (Arquitecto), estaba llorando desesperadamente por un terrible problema. Este hombre me pedía que fuera a orar por ella. En un principio acepte con pocas ganas, sin embargo, después de recapacitar fui donde estaba esta mujer y efectivamente allí estaba llorando desesperadamente. Le pregunté cuál era el problema. Su respuesta fue que ese día le rematarían su casa, y no tenia solución. Después de un rato le pregunte si creía que Dios le podía ayudar, ella respondió que si. Le dije si me permitía orar por ella y por su problema. Ella dijo: es lo último que me queda. Nos fuimos a un salón y allí oramos al Señor, y el Espíritu Santo, se revela y me manda a decir que el problema ya no era de ella sino de Dios y que él abriría todas las puertas para solucionar dicho problema. Amado hermano lo digo para la gloria de Dios: esta mujer salió al Banco en el nombre del Señor, y en la tarde cuando regresa grita en la oficina: ¡Gloria a Dios El a solucionado mi problema!. Desde ese día esta Profesional tiene sobre su escritorio un Nuevo Testamento y lee todos los días la Palabra de Dios. Todo esto va a ocurrir en la medida que nosotros tengamos un cambio en nuestras vidas y seamos efectivamente diferentes como Eliseo.

I: El Cambio es radical en nuestras vidas, cuando abrimos el corazón a Cristo y cuando dejamos que Cristo viva en nosotros.

1.- No basta solo con reconocer quien es el Señor Jesucristo, para decir que hemos cambiado, debemos seguir a Cristo vivir con Cristo y vivir para Cristo.
El mundo está lleno de hombres y mujeres que reconocen a Jesucristo, pero no tienen Cristo en sus corazones.
En el Joven rico había intención "Maestro que haré para heredarla vida eterna), una intención, pero amado hermano, quiero decirte que no basta solo con reconocer ni con la intención, debe haber una decisión cambiar permanentemente para Cristo.

2.- Cumplir los mandamiento de Dios, debe ir acompañado por la fe en Él. (vv 18,19)
a.- Caminamos por fe, por la fe Abraham fue llamado padre de multitudes.

II.- El Cambio es eficaz, verdadero y radical cuando hay renuncia. (v. 21)

1.- Es necesario dar un paso decisivo para rendirnos totalmente a Cristo

a.- Cuando renunciamos debemos dejar que Cristo gobierne nuestras vidas
b.- Cuando renunciamos, no debemos vivir de emociones

2.- Renunciar, es confiar plenamente en Dios (v21), Bendito el varón cuya confianza es Jehová.

a.- Una cosa te falta (v21) una cosa te falta para un cambio radical de tu vida. ¿qué es lo que te falta?
b.- Vende todo lo que tienes: Aquí estaba el problema, aquí estaba la muralla que impedía un cambio radical en la vida de este joven. El amor al dinero representaba su orgullo, el éxito logrado y la autosuficiencia. ¿cuál es la barrera, cuál es la muralla que te impide a ti este cambio que Cristo quiere para tu vida y para que heredes la vida eterna?.

3.- Renunciar es confiar en un premio superior, la vida eterna (v21 b) “y tendrás tesoro en el cielo...”

4.- Renunciar es dejar nuestros principios de vida para tomar la cruz de Cristo y seguirle solo a Él (v 21 c)

La palabra de Dios dice “El que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mi”
“Y ven, sígueme, tomando tu cruz”. Se cuenta que un joven agobiado por sus problemas, ora al Señor y le dice “Señor no puedo más con mi cruz es demasiado pesada y el Señor una vez más acudió al llamado y le contesta: Hijo mío, si no puedes con tu cruz, guárdala y escoge la cruz que tú quieras, la que tú puedas cargar. El joven dio gracias a Dios, dejó su cruz y encontró otra y le dice al Señor “quiero esa que está allá” y el Señor le contesta “Hijo mío, esa es la cruz que acabas de dejar”. Amado hermano, qué importante es mirar a nuestros costados, cuando nuestros problemas nos parecen sin solución o abrumadores, hay cruces mucho más pesadas que las nuestras.

III.- El cambio es radical eficaz, verdadero cuando nos sometemos a Dios (v 22-30)

1.- El someterse significa dar un paso de confianza plena y absoluta en Dios
Jesús nos pide dar un paso decisivo.

2.- Someterse es despojarnos de todo lo no permite una comunión verdadera con el Señor, cumplimos todas las cosas pero una cosa te falta.

3.- Someterse es permitir que Dios haga todo los cambios que el quiere, es dejar que Él perfeccione nuestras vidas, para tener claro que nuestra meta es Cristo y la vida eterna con El (vv 28 – 30). El Apóstol Pablo nos recuerda “...una cosa hago, olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está adelante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3:13-14)

Conclusión
En esta noche quiero decir que con la ayuda de Dios podemos cambiar y asegurarnos que esta transformación tenga durabilidad y permanencia en el tiempo. Nuestro Señor Jesucristo quiere operar estos cambios que cada uno de nosotros anhela y que con nuestras fuerzas es imposible, mas con Dios todo es posible. Que el Espíritu Santo revele cuáles son los cambios que son necesarios en tu vida.

El Señor les Bendice

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