Oración de la comunidad de Taizé
0
0
Cristo, el Resucitado, contigo avanzamos de descubrimiento
en descubrimiento. Buscando lo que esperas de nosotros,
nuestra vida se abre al Espíritu Santo. El hace que brote en
nosotros lo que ni siquiera nos atrevíamos a esperar.
o
Dios de paz, tú no quieres para nosotros la tenaz inquietud,
sino un humilde arrepentimiento de corazón que es como un
impulso de confianza que nos permite depositar en ti
nuestras faltas. Y, poco a poco, descubrimos una paz del
corazón en la luz interior del perdón.
o
Dios vivo, tu escondes nuestro pasado en el corazón de
Cristo y te ocuparás de nuestro futuro
en descubrimiento. Buscando lo que esperas de nosotros,
nuestra vida se abre al Espíritu Santo. El hace que brote en
nosotros lo que ni siquiera nos atrevíamos a esperar.
o
Dios de paz, tú no quieres para nosotros la tenaz inquietud,
sino un humilde arrepentimiento de corazón que es como un
impulso de confianza que nos permite depositar en ti
nuestras faltas. Y, poco a poco, descubrimos una paz del
corazón en la luz interior del perdón.
o
Dios vivo, tu escondes nuestro pasado en el corazón de
Cristo y te ocuparás de nuestro futuro