Oración de intercesión
Voz 1: Dios eterno, generosa fuerza creadora,
que formaste de la nada las cosas más maravillosas,
que en tu amor perfecto diste vida al ser humano
y le ofreciste la oportunidad de velar por la creación.
Danos hoy la capacidad
de descubrir dónde servirte,
de imaginar cómo trabajar para tu Reino,
de discernir el mejor modo de ser luz y sal
en medio de un mundo que hemos ido oscureciendo
a partir de desencuentros, descalificaciones, prejuicios,
odios, violencias de todo tipo, maltratos e insolidaridad,
en medio de una sociedad que ha perdido
el sabor de las cosas buenas y que plenifican la vida.
Voz 2: Dios sensible, que te hiciste hermano y compañero
en Jesús de Nazareth, el caminante de los senderos olvidados,
el que supo extender sus brazos a los excluidos de su tiempo
y abrirles el corazón a los nadies, a los ignorados, a los invisibilizados.
Ayudanos hoy, en nuestros propios desafíos y contradicciones,
a ser mano abierta hacia quienes buscan solidaridad,
a tener un espíritu sensible
hacia quienes necesitan ser oídos y comprendidos,
a pensar con creatividad respuestas
a las preguntas de nuestro tiempo,
a servir con amor en nuestras comunidades,
contribuyendo a que tu Evangelio liberador
sea cada vez menos esperanza y más realidad,
a ser voz de aquellos que nadie quiere escuchar.
Voz 3: Espíritu maternal, soplo cálido de ternura,
presente desde el principio, anticipo de aquello por venir,
que fuiste voz de los profetas y que te expresás
de maneras tan diferentes y ricas en nuestro tiempo.
Abrinos los ojos a las realidad nuevas,
impulsanos a trabajar por otro mundo posible,
compartinos el sueño de Dios, para que sepamos cómo debe ser la vida.
Danos la capacidad de percibirte y sentirte,
sin prejuicios, sin temores, sin presunciones,
sin creernos dueños de ninguna verdad,
soplando donde Vos quieras, siempre compartiendo
aquella vida abundante, rica y plena, que nos mostró Jesús.
Voz 4: Dios comunidad, Dios familia, Dios Trinidad,
Dios del trabajo en equipo, Dios Uno y diverso.
Que esta comunidad una y diversa
en la que nos encontramos
y nos reconocemos como hermanos y hermanas,
sepa en todo tiempo y en toda circunstancia
dejarse iluminar por la potencia de tu amor jugado.
Que este espacio que formamos
diferentes pero unidos,
distintos pero buscando un mismo horizonte,
sea un espacio en el que Vos mismo vayas marcando el rumbo,
señalando el horizonte hacia el cual caminar
con fe y esperanza viva.
AMEN.