Oración de confesión
0
0
(mientras se acompaña con una suave melodía)
Queremos que nuestros ojos estén puestos en ti
cada día de nuestra vida
y cada hora de nuestros días
queremos alabarte y bendecirte
en cada pensamiento, en cada palabra,
en cada acción,
en nuestra vida persona, en nuestra vida familiar
y en nuestra vida como familia de fe
queremos que nuestro testimonio
refleje a Jesús, siempre…
cuando estamos en la iglesia,
pero también en la vereda,
en la escuela, en el negocio,
en la casa, con nuestros amigos.
Y te pedimos perdón, Señor,
cuando no dejamos que tu propósito
se cumpla en nuestra vida,
cuando somos egoístas,
cuando no dejamos que tu amor nos cambie,
cuando nos obstinamos en repetir los mismos errores,
cuando no nos ejercitamos en la solidaridad,
cuando no sabemos extender una mano generosa,
cuando tu iglesia es la última de nuestras opciones
porque ponemos en primer lugar tantas otras cosas.
Te pedimos perdón, Señor.
y que nos renueves
con tu amor sanador,
que nos hagas nuevas personas,
con un corazón que sepa ser fiel
y una fe que sea coherente.
Míranos con buenos ojos, Señor,
perdónanos
y danos tu paz.
De la liturgia Reformada
Queremos que nuestros ojos estén puestos en ti
cada día de nuestra vida
y cada hora de nuestros días
queremos alabarte y bendecirte
en cada pensamiento, en cada palabra,
en cada acción,
en nuestra vida persona, en nuestra vida familiar
y en nuestra vida como familia de fe
queremos que nuestro testimonio
refleje a Jesús, siempre…
cuando estamos en la iglesia,
pero también en la vereda,
en la escuela, en el negocio,
en la casa, con nuestros amigos.
Y te pedimos perdón, Señor,
cuando no dejamos que tu propósito
se cumpla en nuestra vida,
cuando somos egoístas,
cuando no dejamos que tu amor nos cambie,
cuando nos obstinamos en repetir los mismos errores,
cuando no nos ejercitamos en la solidaridad,
cuando no sabemos extender una mano generosa,
cuando tu iglesia es la última de nuestras opciones
porque ponemos en primer lugar tantas otras cosas.
Te pedimos perdón, Señor.
y que nos renueves
con tu amor sanador,
que nos hagas nuevas personas,
con un corazón que sepa ser fiel
y una fe que sea coherente.
Míranos con buenos ojos, Señor,
perdónanos
y danos tu paz.
De la liturgia Reformada