Héroes ocultos.
0
0
Héroes ocultos.
2da de Timoteo 4: 1-6.
1Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2que prediques la palabra que instes a tiempo y fuera de tiempo redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. 3Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. 5Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio.
6Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. 7He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 8Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.
Introducción:
En la actualidad hemos visto y oído héroes que Dios levanta, personas que Dios usa, que por medio del Espíritu Santo sanan cojos, ciegos ven, miles de almas son cambiadas, pero estos son los héroes públicos, existen otro tipo de héroes que no son conocidos, que tal vez nunca ellos lleguen a saber que ni siquiera su nombre será alguna vez pronunciado por otra persona con sentido de agradecimiento o reconocimiento, que a lo mejor nunca sabrán que sin saberlo fueron los héroes anónimos que Dios uso para transformar una ciudad entera, un país, una multitud, etc.
Tal vez estos héroes no matan Gigantes antes de la hora de la comida, tal vez no le ha tocado enderezar a un lisiado de los pies a las puertas de un templo, tal vez ni siquiera han logrado caminar unos segundos sobre el agua, para esa clase de héroes es este mensaje.
Grueso del mensaje:
Cuando el apóstol Pablo esta hablando en este pasaje podemos notar en sus palabras un dejo de angustia, desesperación hasta cierto punto al decirle a este muchachito que no dejara de enseñar la buena palabra.
Me hace llorar muchísimo las palabras que le habla mas adelante cuando le dice tráeme el capote que deje en Troas, los libros y los pergaminos, apresúrate a llegar antes del invierno.
En otras palabras: no estoy listo para este crudo invierno, necesito el capote, tráeme a Marcos me es útil casi no puedo leer ni escribir mas, ya que debido a la escasa luz de las celdas que he pasado por Cristo me he quedado casi ciego, y lo necesito para continuar con el ministerio, ya casi voy a Morir me dictaron mi sentencia final y cuando fui a Juicio estuve solo, nadie me acompaño, además una persona por acá me a hecho la vida imposible, cuídate de él cuando vengas.
Debió pasar por la cabeza de Pablo:
¿Vale la pena?
Todos estos pergaminos que he escrito ¿serán Leídos?
Curiosamente Pablo cuando escribía sus cartas eran con un destino concreto, mas nunca imagino que las cartas que el escribió transformaría a millares y millares de corazones, que salvarían mas vidas que ninguna organización humanitaria del mundo, que miles de Vidas y hogares enteros han sido transformados por las letras que Dios le permitió escribir con la Inspiración Divina del Espíritu Santo.
Para el tiempo que Pablo Vivió, pasó por el mundo casi desapercibido, se podría decir que Benny Hinn en la actualidad es mas conocido que lo que Pablo fue en su época.
No obstante el continuó con su ministerio, no recibió los suficiente apapachos y palmaditas en la espalda, el continuo haciendo su trabajo tras bambalinas lleno del fuego de Dios.
El día de hoy existen muchísimos héroes ocultos en nuestros días que nadie reconoce su trabajo, es mas nadie sabe ni siquiera que existen, no traen ropa llamativa con capas, no son así.
Son héroes que pelean diariamente la batalla, que van y rescatan las almas del infierno, que oran, adoran en una esquina de su cuarto, solo ellos y Dios saben la obra que están haciendo, nadie mas, no reciben la palmadita en la espalda, no usan plataformas y talvez ni siquiera son conocidos por la muchedumbre, Héroes que salen embestidos de la gloria de Dios y salen a predicar y llegan a la casa del alcohólico y la prostituta, el homosexual o el drogadicto, al futuro suicida, a la madre golpeada, al niño violado y les ofrece un Cristo que repara Hogares y transforma corazones.
Esos son estos Héroes, tal vez nunca escuchen sus nombres en la radio o vean sus rostros sonrientes en espectaculares por la carretera, tal vez nunca aparezcan en la televisión, pero aparecerán en los anales de la historia del Libro que tiene Dios de las obras de sus Santos y cuando Jesús venga con su galardón recibirán la recompensa y el reconocimiento de las manos de nuestro Señor Jesucristo.
John Egglen nunca había predicado un sermón en su vida. Jamás, no es que no quisiera hacerlo, sólo que nunca tuvo la necesidad de hacerlo. Pero una mañana lo hizo. La nieve cubrió de blanco su ciudad, Colchéster, Inglaterra, de pronto decidió no ir a la Iglesia ese día debido a que había mucha nieve e iba a ser difícil llegar a ese día, pero después de no sentirse cómodo por su desición tomó su abrigo y fue, al llegar para su sorpresa había otras personas esperando también, que habían decidido asistir a la iglesia, se recibió la noticia de que el pastor estaba varado por la nieve y no iba a poder asistir, así que John tuvo como diacono que dar su primer sermón, no podía regresar a las almas como llegaron, a demás había un muchachito de tan solo 13 años que había venido por primera vez a la iglesia, así que tomo valor y subió al Pulpito para dar su primer sermón un sermón, no muy consistente que digamos pero al final el predicador miró directamente al muchachito a los ojos y le dijo: Hijo mira a Jesús, Hijo mira a Jesús, Hijo mira a Jesús, Años mas tarde Charles Haddon Spurgeon, “el príncipe de los predicadores” decía: esa vez que me dijo el predicador que Mirara a Jesús, Sí miré, y allí mismo se disipó la nube que estaba sobre mi corazón, las tinieblas se alejaron y en ese momento vi el sol.
¡Hey! Héroe, levántate con poder, con autoridad, que si nadie te reconoce que importa, del cielo Dios te brinda un aplauso, cuando vas y sales, los Ángeles del cielo están a una, cada que alcanzas a una persona para Jesús se celebra una fiesta en el cielo por un pecador arrepentido y ¿qué crees? Tu nombre irrumpe en el cielo, Dios dice ese Héroe que yo puse allá en la tierra esta cumpliendo su trabajo, no me ha decepcionado, vale su peso en oro, es un guerrero, Es mi hijo.
El sale y pelea como hijo del León de Judá, no es reconocido, pero miren como corre sangre real por sus venas, a leguas se mira su porte y gallardía, es un guerrero imparable que con sus acciones hace que tiemble el centro del infierno y las alarmas de peligro del enemigo se enciendan.
Tu eres ese Héroe, Adelante a vencer, Graba estas letras en tu corazón.
Dios Te bendiga, Siempre.
2da de Timoteo 4: 1-6.
1Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2que prediques la palabra que instes a tiempo y fuera de tiempo redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. 3Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. 5Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio.
6Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. 7He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 8Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.
Introducción:
En la actualidad hemos visto y oído héroes que Dios levanta, personas que Dios usa, que por medio del Espíritu Santo sanan cojos, ciegos ven, miles de almas son cambiadas, pero estos son los héroes públicos, existen otro tipo de héroes que no son conocidos, que tal vez nunca ellos lleguen a saber que ni siquiera su nombre será alguna vez pronunciado por otra persona con sentido de agradecimiento o reconocimiento, que a lo mejor nunca sabrán que sin saberlo fueron los héroes anónimos que Dios uso para transformar una ciudad entera, un país, una multitud, etc.
Tal vez estos héroes no matan Gigantes antes de la hora de la comida, tal vez no le ha tocado enderezar a un lisiado de los pies a las puertas de un templo, tal vez ni siquiera han logrado caminar unos segundos sobre el agua, para esa clase de héroes es este mensaje.
Grueso del mensaje:
Cuando el apóstol Pablo esta hablando en este pasaje podemos notar en sus palabras un dejo de angustia, desesperación hasta cierto punto al decirle a este muchachito que no dejara de enseñar la buena palabra.
Me hace llorar muchísimo las palabras que le habla mas adelante cuando le dice tráeme el capote que deje en Troas, los libros y los pergaminos, apresúrate a llegar antes del invierno.
En otras palabras: no estoy listo para este crudo invierno, necesito el capote, tráeme a Marcos me es útil casi no puedo leer ni escribir mas, ya que debido a la escasa luz de las celdas que he pasado por Cristo me he quedado casi ciego, y lo necesito para continuar con el ministerio, ya casi voy a Morir me dictaron mi sentencia final y cuando fui a Juicio estuve solo, nadie me acompaño, además una persona por acá me a hecho la vida imposible, cuídate de él cuando vengas.
Debió pasar por la cabeza de Pablo:
¿Vale la pena?
Todos estos pergaminos que he escrito ¿serán Leídos?
Curiosamente Pablo cuando escribía sus cartas eran con un destino concreto, mas nunca imagino que las cartas que el escribió transformaría a millares y millares de corazones, que salvarían mas vidas que ninguna organización humanitaria del mundo, que miles de Vidas y hogares enteros han sido transformados por las letras que Dios le permitió escribir con la Inspiración Divina del Espíritu Santo.
Para el tiempo que Pablo Vivió, pasó por el mundo casi desapercibido, se podría decir que Benny Hinn en la actualidad es mas conocido que lo que Pablo fue en su época.
No obstante el continuó con su ministerio, no recibió los suficiente apapachos y palmaditas en la espalda, el continuo haciendo su trabajo tras bambalinas lleno del fuego de Dios.
El día de hoy existen muchísimos héroes ocultos en nuestros días que nadie reconoce su trabajo, es mas nadie sabe ni siquiera que existen, no traen ropa llamativa con capas, no son así.
Son héroes que pelean diariamente la batalla, que van y rescatan las almas del infierno, que oran, adoran en una esquina de su cuarto, solo ellos y Dios saben la obra que están haciendo, nadie mas, no reciben la palmadita en la espalda, no usan plataformas y talvez ni siquiera son conocidos por la muchedumbre, Héroes que salen embestidos de la gloria de Dios y salen a predicar y llegan a la casa del alcohólico y la prostituta, el homosexual o el drogadicto, al futuro suicida, a la madre golpeada, al niño violado y les ofrece un Cristo que repara Hogares y transforma corazones.
Esos son estos Héroes, tal vez nunca escuchen sus nombres en la radio o vean sus rostros sonrientes en espectaculares por la carretera, tal vez nunca aparezcan en la televisión, pero aparecerán en los anales de la historia del Libro que tiene Dios de las obras de sus Santos y cuando Jesús venga con su galardón recibirán la recompensa y el reconocimiento de las manos de nuestro Señor Jesucristo.
John Egglen nunca había predicado un sermón en su vida. Jamás, no es que no quisiera hacerlo, sólo que nunca tuvo la necesidad de hacerlo. Pero una mañana lo hizo. La nieve cubrió de blanco su ciudad, Colchéster, Inglaterra, de pronto decidió no ir a la Iglesia ese día debido a que había mucha nieve e iba a ser difícil llegar a ese día, pero después de no sentirse cómodo por su desición tomó su abrigo y fue, al llegar para su sorpresa había otras personas esperando también, que habían decidido asistir a la iglesia, se recibió la noticia de que el pastor estaba varado por la nieve y no iba a poder asistir, así que John tuvo como diacono que dar su primer sermón, no podía regresar a las almas como llegaron, a demás había un muchachito de tan solo 13 años que había venido por primera vez a la iglesia, así que tomo valor y subió al Pulpito para dar su primer sermón un sermón, no muy consistente que digamos pero al final el predicador miró directamente al muchachito a los ojos y le dijo: Hijo mira a Jesús, Hijo mira a Jesús, Hijo mira a Jesús, Años mas tarde Charles Haddon Spurgeon, “el príncipe de los predicadores” decía: esa vez que me dijo el predicador que Mirara a Jesús, Sí miré, y allí mismo se disipó la nube que estaba sobre mi corazón, las tinieblas se alejaron y en ese momento vi el sol.
¡Hey! Héroe, levántate con poder, con autoridad, que si nadie te reconoce que importa, del cielo Dios te brinda un aplauso, cuando vas y sales, los Ángeles del cielo están a una, cada que alcanzas a una persona para Jesús se celebra una fiesta en el cielo por un pecador arrepentido y ¿qué crees? Tu nombre irrumpe en el cielo, Dios dice ese Héroe que yo puse allá en la tierra esta cumpliendo su trabajo, no me ha decepcionado, vale su peso en oro, es un guerrero, Es mi hijo.
El sale y pelea como hijo del León de Judá, no es reconocido, pero miren como corre sangre real por sus venas, a leguas se mira su porte y gallardía, es un guerrero imparable que con sus acciones hace que tiemble el centro del infierno y las alarmas de peligro del enemigo se enciendan.
Tu eres ese Héroe, Adelante a vencer, Graba estas letras en tu corazón.
Dios Te bendiga, Siempre.